Agosto ha sido un mes relativamente tranquilo en los mercados, con los índices cerrando con resultados positivos, aunque dispares: el índice Eurostoxx-50 sube en el mes un 0,66%, el S&P-500 americano un 1,91%, y el Nikkei-225 japonés un 4,01%. El resultado acumulado en 2025 es de 9,31%, 9,84% y 7,08%, respectivamente.
Aunque EE.UU. continúa negociando con algunos socios comerciales relevantes (p.e. India o Taiwan), los acuerdos ya alcanzados con socios importantes como UE, Japón o Reino Unido, y la entrada en vigor de unos aranceles universales para el resto, rebajaron ligeramente la incertidumbre y animó a los mercados. También ayudaron la resistencia de las economías americana y europea, y unos resultados empresariales mejores de lo esperado.
Sin embargo, a finales de agosto, un Tribunal Federal de EE.UU. declaró ilegales los aranceles impuestos por la Administración Trump señalando que su aprobación corresponde al Congreso y no al Ejecutivo. El gobierno tiene hasta el 14 de octubre para defender su legalidad. Al margen de la incertidumbre y desprestigio internacional que supondría un fallo en contra, añadiría presión a la ya tensa situación fiscal del país. No en vano, la recaudación generada por los aranceles eran uno de los pilares para la contención del déficit público de EE.UU.
En paralelo, crece la presión del gobierno americano sobre la Reserva Federal para que baje agresivamente los tipos de interés, e incluso cuestiona abiertamente si es deseable mantener la independencia del banco central cuando su política monetaria interfiere con la política económica y fiscal, y parece maniobrar para tomar su control. Aun siendo un movimiento sorprendente en un país desarrollado, históricamente no ha sido extraño que el banco central haya acabado siendo controlado por el Tesoro Público (gobierno) cuando la situación económica lo ha requerido. No menos sorprendente ha sido la decisión del gobierno de tomar una participación del 10% en el fabricante de microprocesadores Intel. Seguiremos de cerca el creciente intervencionismo de los gobiernos en la economía, y su impacto en los mercados.
En el resto de las economías desarrolladas la situación fiscal continúa siendo delicada. Durante los últimos meses se ha producido un incremento gradual de las rentabilidades exigidas a los bonos a largo plazo (30 años) de países como Reino Unido, Japón o Francia. En este último, el primer ministro ha anunciado que se someterá a una moción de confianza el 8 de septiembre, tras el rechazo generado por las medidas de austeridad anunciadas para tratar de controlar el enorme déficit presupuestario: congelación de pensiones y de salarios de los funcionarios, y recortes en el empleo público, en el gasto social y en la sanidad, entre otras.
Ante esta acumulación de incertidumbres económicas y geopolíticas, y con las crecientes tensiones derivadas de un endeudamiento público históricamente elevado, mantenemos la estrategia defensiva ya comentada en meses pasados. Y sin que ello esté lastrando la rentabilidad de nuestros fondos, que cierran el mes con un resultado muy positivo: FONPROFIT sube un 1,64%, PROFIT BOLSA un 2,42% y PROFIT PENSIÓN un 1,64%. Nuestro fondo más conservador, de renta fija a corto plazo, PROFIT CORTO PLAZO se apreció un 0,27% en el mes. Todos los fondos acumulan una rentabilidad anual positiva: 6,45%, 11,56%, 6,40% y 2,40%, respectivamente.
31/08/2025 | Fonprofit, FI | Profit Bolsa, FI | Profit Previsión, PP | Profit Corto Plazo, FI |
RESULTADOS 2025 | 6,45% | 11,56% | 6,40% | 2,40% |
RESULTADOS 2024 | 5,85% | 6,93% | 6,09% | 4,21% |
% RENTA VARIABLE | 37,03% | 76,45% | 38,73% | |
% RV INV. INTERNACIONAL | 93,73% | 93,15% | 93,24% |